9 de diciembre de 2007

Síndrome del domingo en la noche

Vengo llegando de un bar. Compartí amenamente unas birritas y unas bocas con 4 de mis mejores amigos.
Quedamos de vernos entre cinco y media y seis de la tarde en Long Horns, en "plan tranquilo" porque mañana hay que bretear. Todos mis amigos y yo estuvimos de acuerdo en que no podíamos abusarnos en ningún sentido porque sino mañana que vá, empezaríamos mal la semana.
Los domingos son así, siempre en plan tranquilo, si se hace la excepción de salir a tomarse algo, siempre es con medida, en un lugar poco ruidoso y sin quedarse más tarde de las once de la noche.
A eso lo llamo síndrome del domingo por la noche y considero que casi todos los que pertenecemos a la clase trabajadora padecemos de este mal.
Es una sensación entre nostalgia y estrés, de saber que el fin de semana está llegando tristemente a su final y que nos toca volver al mundo real.
Usualmente los síntomas se empiezan a sentir después del mediodía del domingo, nos da pereza todo pero al mismo tiempo nos empezamos a poner ansiosos, recordando que tenemos pendiente en la oficina, repasando mentalmente la agenda, eligiendo la ropa que usaremos al día siguiente y prohibiendonos a nosotros mismos cualquier actividad que nos mantenga despiertos más allá de las diez o nos provoque alguna consecuencia negativa en el temido lunes por la mañana.
Una vez que amanece el bendito lunes todos los síntomas se desvanecen para volver el domingo siguiente a quitarnos la paz.
Me desespera tener este síndrome, me desespera que casi todos lo tengamos. Acaso el lunes o el martes tenemos algún problema en desverlarnos?? NO!!! Eso solo pasa los domingos en la noche, nos acorta los placeres del fin de semana y con qué fin,,, ninguno. Porque al fin y al cabo es más dañina la angustia de ver terminado nuestro jugoso dia libre que cualquier gustito excesivo que tengamos.
Yo me pregunto: No es mejor pasar una noche vacilando y tomando con los amigos hasta altas horas de la noche, con nuestro cuerpo generando endorfinas y cargando las pilas de buena vibra y positivismo que tumbarnos en la cama, viendo al cielorraso como idiotas, esperando que nos dé sueño y dando vueltas en la cama sin lograr dormir????
Es estúpido perder el tiempo así, dominados por un estrés crónico que solo nos arruina la tarde del domingo.
Como dijo Joaquín Sabina, nadie se ha muerto por ir sin dormir una vez al currelo.
Voto por que los bares cierren los domingos a las 2am y no a las 11pm, y los insto a todos a aprovechar su domingo como mejor les parezca, pero sin pensar en el lunes.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jajaja... que buena teoría carito...

De verdad que nunca se me había ocurrido que a todos nos pasaba lo mismo...

Definitivamente hay que aprovechar más esos domingos... todavía son parte del fin de semana y es cuando mejor se debería disfrutar.

Ahí cuando tengas una de esas tardes de domingo sin hacer nada, me avisas. Fijo yo me apunto a unos fresquitos de domingo!

Chao! besos!